Congresista Javier Diez Canseco presenta Proyecto de Ley que propone la creación del servicio social universitario
Con la finalidad de fortalecer el vínculo entre la Universidad y la sociedad y decanalizar el aporte de los estudiantes universitarios al desarrollo del país
El Proyecto de Ley Nº 595-2011-CR propone que los estudiantes de las universidades públicas y privadas, como parte de su formación profesional, realicen actividades temporales que impliquen una
contribución en la ejecución de políticas públicas de interés social y en la mejora de la calidad de vida de los grupos vulnerables en nuestra sociedad.
El servicio social universitario ha sido implementado con éxito en diversos países de la región, tales como Brasil, Colombia, Costa Rica, Chile y México.
El día de ayer, lunes 5 de Noviembre, el Congresista Javier Diez Canseco presentó el Proyecto de Ley N° 595-2011-CR que propone la creación del Servicio Social Universitario. La propuesta busca que los estudiantes de las universidades públicas y privadas den al menos dos meses de su tiempo para aplicar los conocimientos técnicos que hayan obtenido en la universidad en la ejecución de proyectos públicos de interés social. Como sucede en otros países latinoamericanos y de Europa, la idea es fomentar un comportamiento altruista y solidario que aporte en la mejora de la calidad de vida de los grupos más vulnerables en nuestra sociedad.
De este modo, la propuesta planteada por el congresista Diez Canseco pretende contribuir con el fortalecimiento del vínculo entre la Universidad y la sociedad peruana, así como canalizar el aporte de los estudiantes universitarios al desarrollo del país.
“En la historia del Perú y el debate mundial siempre ha estado en discusión cuál debe ser el rol de la universidad. Ya desde el siglo XIX y el XX, nuestra vida republicana nos cuestionaba sobre la necesidad de que la universidad esté articulada al desarrollo del país y a resolver sus principales problemáticas. Lamentablemente en los últimos años, en nuestro país se ha advertido una ruptura entre la universidad y un importante sector de la sociedad, debido a que se le ha reprochado con frecuencia que la universidad no ha sabido satisfacer las necesidades de la población ni contribuir con el desarrollo del país”, señaló el congresista Diez Canseco.
Según la iniciativa legislativa, la prestación del Servicio Social Universitario será un requisito obligatorio para poder graduarse que busca promover preferentemente el intercambio de experiencias, el fomento de la descentralización y el respeto de la diversidad, interculturalidad y pluralidad del país, a través de la ejecución de programas sociales en sus propias localidades e incluso en las diferentes regiones del país. En ese sentido, el servicio social universitario también pretende contribuir a:
a. Desarrollar en el estudiante una conciencia de solidaridad y compromiso con la sociedad a la que pertenece, convirtiendo esta prestación en un acto de reciprocidad para con la sociedad, a través de los planes y programas que el sector público implemente en ejercicio de sus funciones, ya sea en forma autónoma o en colaboración con la sociedad civil.
b. Promover la reforma de la educación universitaria, con la finalidad de fortalecer su papel en el desarrollo del país y vincular sus planes y programas con la sociedad y la realidad nacional.
c. Contribuir a la formación académica y capacitación profesional del prestador del servicio social.
d. Promover el respeto a la pluralidad y la construcción de relaciones deconvivencia e intercambio entre personas y grupos reconocidos y asumidos en su diversidad.
“El Perú necesita que sus jóvenes apoyen a las comunidades a formular proyectos viables en la discusión de los presupuestos participativos; nuestros barrios más pobres demandan jóvenes que ayuden a mejorar su nutrición, comiendo mejor y más barato o que las y los psicólogos brinden a quien lo necesite su apoyo para fortalecer la salud mental en el país, como a aquellas personas que sufren depresión o a las víctimas de la violencia; las y los economistas pueden dar la asistencia técnica a los microemprendedores; arquitectos y arquitectas pueden diseñar los planos y colaborar en la construcción y refacción de viviendas o centros comunitarios, las y los estudiantes de agronomía pueden capacitar a pequeños productores campesinos”, refirió el congresista.
El servicio social universitario obligatorio ha sido implementado con éxito en diversos países de la región, tales como Colombia, Costa Rica, México y Venezuela. En México, por ejemplo, en los últimos años el Servicio Social ha multiplicado las alternativas ofrecidas a los estudiantes para cumplir con sus horas de servicio en el contexto de proyectos significativos para el desarrollo local. En Costa Rica, el Trabajo Comunal Universitario (TCU) ha ofrecido desde su creación en 1975 más de 450 proyectos que suponen más de 16.000.000 de horas contribuidas a la sociedad. Por otro lado, en Brasil y Chile, donde el servicio social se realiza en virtud a convenios suscritos por la universidad, el programa también ha sido exitoso. En Brasil, por ejemplo, la OSC Universidade Solidaria (UNISOL), desde 1995 ha articulado el trabajo social de cerca de 20.000 estudiantes de 200 universidades en 1.000 comunidades de todo el país.
En ese sentido, “el Servicio marca un camino para que las universidades se vinculen más decididamente con la realidad nacional en sus planes y programas curriculares. El compromiso social con el país y con los más desfavorecidos es una condición indispensable para poder construir una ciudadanía de todos y para todos. En este sentido, el Servicio Social Universitario plantea construir una sociedad más inclusiva y que mire al bicentenario de nuestra independencia con un corazón solidario y emprendedor”, sentenció finalmente el congresista.
El Proyecto de Ley Nº 595-2011-CR propone que los estudiantes de las universidades públicas y privadas, como parte de su formación profesional, realicen actividades temporales que impliquen una
contribución en la ejecución de políticas públicas de interés social y en la mejora de la calidad de vida de los grupos vulnerables en nuestra sociedad.
El servicio social universitario ha sido implementado con éxito en diversos países de la región, tales como Brasil, Colombia, Costa Rica, Chile y México.
El día de ayer, lunes 5 de Noviembre, el Congresista Javier Diez Canseco presentó el Proyecto de Ley N° 595-2011-CR que propone la creación del Servicio Social Universitario. La propuesta busca que los estudiantes de las universidades públicas y privadas den al menos dos meses de su tiempo para aplicar los conocimientos técnicos que hayan obtenido en la universidad en la ejecución de proyectos públicos de interés social. Como sucede en otros países latinoamericanos y de Europa, la idea es fomentar un comportamiento altruista y solidario que aporte en la mejora de la calidad de vida de los grupos más vulnerables en nuestra sociedad.
De este modo, la propuesta planteada por el congresista Diez Canseco pretende contribuir con el fortalecimiento del vínculo entre la Universidad y la sociedad peruana, así como canalizar el aporte de los estudiantes universitarios al desarrollo del país.
“En la historia del Perú y el debate mundial siempre ha estado en discusión cuál debe ser el rol de la universidad. Ya desde el siglo XIX y el XX, nuestra vida republicana nos cuestionaba sobre la necesidad de que la universidad esté articulada al desarrollo del país y a resolver sus principales problemáticas. Lamentablemente en los últimos años, en nuestro país se ha advertido una ruptura entre la universidad y un importante sector de la sociedad, debido a que se le ha reprochado con frecuencia que la universidad no ha sabido satisfacer las necesidades de la población ni contribuir con el desarrollo del país”, señaló el congresista Diez Canseco.
Según la iniciativa legislativa, la prestación del Servicio Social Universitario será un requisito obligatorio para poder graduarse que busca promover preferentemente el intercambio de experiencias, el fomento de la descentralización y el respeto de la diversidad, interculturalidad y pluralidad del país, a través de la ejecución de programas sociales en sus propias localidades e incluso en las diferentes regiones del país. En ese sentido, el servicio social universitario también pretende contribuir a:
a. Desarrollar en el estudiante una conciencia de solidaridad y compromiso con la sociedad a la que pertenece, convirtiendo esta prestación en un acto de reciprocidad para con la sociedad, a través de los planes y programas que el sector público implemente en ejercicio de sus funciones, ya sea en forma autónoma o en colaboración con la sociedad civil.
b. Promover la reforma de la educación universitaria, con la finalidad de fortalecer su papel en el desarrollo del país y vincular sus planes y programas con la sociedad y la realidad nacional.
c. Contribuir a la formación académica y capacitación profesional del prestador del servicio social.
d. Promover el respeto a la pluralidad y la construcción de relaciones deconvivencia e intercambio entre personas y grupos reconocidos y asumidos en su diversidad.
“El Perú necesita que sus jóvenes apoyen a las comunidades a formular proyectos viables en la discusión de los presupuestos participativos; nuestros barrios más pobres demandan jóvenes que ayuden a mejorar su nutrición, comiendo mejor y más barato o que las y los psicólogos brinden a quien lo necesite su apoyo para fortalecer la salud mental en el país, como a aquellas personas que sufren depresión o a las víctimas de la violencia; las y los economistas pueden dar la asistencia técnica a los microemprendedores; arquitectos y arquitectas pueden diseñar los planos y colaborar en la construcción y refacción de viviendas o centros comunitarios, las y los estudiantes de agronomía pueden capacitar a pequeños productores campesinos”, refirió el congresista.
El servicio social universitario obligatorio ha sido implementado con éxito en diversos países de la región, tales como Colombia, Costa Rica, México y Venezuela. En México, por ejemplo, en los últimos años el Servicio Social ha multiplicado las alternativas ofrecidas a los estudiantes para cumplir con sus horas de servicio en el contexto de proyectos significativos para el desarrollo local. En Costa Rica, el Trabajo Comunal Universitario (TCU) ha ofrecido desde su creación en 1975 más de 450 proyectos que suponen más de 16.000.000 de horas contribuidas a la sociedad. Por otro lado, en Brasil y Chile, donde el servicio social se realiza en virtud a convenios suscritos por la universidad, el programa también ha sido exitoso. En Brasil, por ejemplo, la OSC Universidade Solidaria (UNISOL), desde 1995 ha articulado el trabajo social de cerca de 20.000 estudiantes de 200 universidades en 1.000 comunidades de todo el país.
En ese sentido, “el Servicio marca un camino para que las universidades se vinculen más decididamente con la realidad nacional en sus planes y programas curriculares. El compromiso social con el país y con los más desfavorecidos es una condición indispensable para poder construir una ciudadanía de todos y para todos. En este sentido, el Servicio Social Universitario plantea construir una sociedad más inclusiva y que mire al bicentenario de nuestra independencia con un corazón solidario y emprendedor”, sentenció finalmente el congresista.
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